Los humanos tenemos una necesidad de ser aprobados; no por los demás, sino por nosotros mismos. Esa necesidad, en muchas ocasiones, no es satisfecha y hay quienes viven buscando afuera eso que no encuentran dentro de si mismos. Muchos se enganchan en relaciones tóxicas con un solo fin, poder llegar a sentir que uno es suficientemente bueno para esa persona porque dentro de uno mismo, no se encuentra ese sentimiento. También, algunas personas se quedan en roles que no tienen que ocupar o se ponen a sí mismos de último frente a todos los demás para conseguir una sola cosa, ganarse el amor y aprobación de los demás que no encuentran dentro de si mismos. Esto es tan peligroso porque incluso las personas más brillantes, actúan en contra de su propio beneficio e intereses por tener una imagen tan devaluada de si mismas; eliminando todo aquello que pudiesen aportar. Y así, dejan de actuar según lo que dice su intuición, perdiendo así su propia identidad.
Al comenzar a atender pacientes, me empecé a hacer la misma pregunta con todos. ¿Qué ocurrió en sus vidas que los llevó a sentir que no eran suficientemente buenos? ¿por qué no podían quererse, confiar en si mismos y aceptarse? . Aparte de poder trabajar en todo aquello que les inquieta, creo fielmente que lo más importante es que puedan conseguir aceptarse y confiar en si mismos. El problema es que la mayoría de las veces, las personas no saben ni quienes son. Han pensado tanto en como complacer a los demás y tan poco en como complacerse a si mismos.
Para que una persona se pueda aceptar, tiene que conocerse y entenderse. Es decir, ponerse en contacto con sus creencias, deseos, experiencias de vida y mensajes que ha recibido a través del tiempo para poder desarrollar su propia identidad. Muchos pacientes me preguntan, ¿cuando voy a estar mejor? casi siempre respondo lo mismo, "en la medida en que puedas ser más coherente contigo mismo y con lo que realmente quieres en la vida, sentirás más paz". Cuando esto se logra, los obstáculos de la vida, se enfrentan con mucha más confianza.
Hacemos juicios todo el tiempo pero ninguno es tan fuerte como el que hacemos con nosotros mismos. ¿por qué uno piensa que los demás lo van a juzgar como uno mismo no juzga a nadie? ¿por qué uno tiene esa idea de que tiene que actuar según lo que agrade a los demás para ser aprobado? la realidad es porque uno tiene en la mente al otro y no a uno mismo. ¿que ironía, no? la propia mente de una persona actúa según lo que pueden decir otras mentes pero no según lo que dice la propia. Así, uno anula todo aquello que pueda salir de uno mismo tratando de cambiarlo para poder que encaje o se adapte a los requerimientos de otras personas. Lo que sucede es que uno se hace invisible pero aun teniendo todas las ganas de poder ser visible y como consecuencia, uno sufre mucho porque nadie ve como uno es realmente. Hay quienes necesitarían mucha reflexión para poder entender como la visión que tiene de si mismos ha afectado en gran cantidad de decisiones que han tomado durante su vida. Una imagen negativa de uno mismo puede resultar en la elección de una pareja incorrecta, un matrimonio que solo trae frustraciones, una carrera que nunca despega, aspiraciones que siempre son auto saboteadas, incapacidad para disfrutar de los propios éxitos, hábitos de ingesta alimentaria y de vida destructivos, ansiedad crónica o depresión, entre otras. Por esto, hay tantas personas reprimidas que eliminan sus deseos para poder ser queridos y aceptados y así poder recibir eso que tanto anhelan que ellos mismos no se han podido dar.
Para poder aprobarnos, necesitamos sentir que somos suficientes y que podemos cumplir de manera adecuada con los requerimientos de la vida. Necesitamos Confiar en nuestra mente y en que somos valiosos; recuperar nuestra intuición. El mundo se convierte en un lugar muy temido para quienes no confían en su intuición. Y así como tener un sistema inmune saludable, no garantiza que uno nunca se va a enfermar pero sí que el cuerpo va a pelear mejor contra las enfermedades, así mismo confiar en uno mismo no garantiza que no vamos a sufrir y que no tendremos miedos,rabias, tristezas pero sí nos dará más fuerza, resistencia y capacidad para evolucionar y crecer en medio de la adversidad.